Armarse primero
Opción A
Jay Di se acerca a un vaso de leche caliente que el Mr. prepara para la media tarde, lo arroja y lo empuja contra su antigua gomifamilia. La leche caliente derrite algunas gomitas y el vaso de vidrio remata aplastando otras.
Jay Di no puede entender que pese al dolor que sienten, siguen queriéndolo atacar; caminando en dirección hacia sus antiguos compañeros de paquete con edición limitada, se postra por el peso de su culpa y su incomprensión junto a una cabeza ya casi sin forma y no comprende el por qué de sus deseos.
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Con lágrimas de grenetina, ve un lucero cálido en los ojos cóncavos de la cabeza, ya con más forma de charco que objeto grumoso; ¿Desde cuándo tenemos un lucero ámbar adentro de los ojos? preguntó Jay Di, antes de darse cuenta que ese lucero era en realidad una clase de hilo conductor adentro del cuerpo de otro compañero; ¡No eran ellos!, exclamó la gomita con esencia amarilla y pegajosa en las manos, entonces ¿Quién hizo esto?
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Jay Di siente brisa frÃa pero condensada y retrocede para caer al piso de espaldas, mira a unos cm de él y es la misma sustancia que estaba adentro de sus compañeros; voltea a ver en dirección donde salió el proyectil, y ve una clase de hongo con miel en sus pÃleos.
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